I.
INTRODUCCIÓN
Internet
es uno de los fenómenos de mayor rapidez de penetración en
la sociedad y en el mercado. Su impacto se está experimentando
tanto en el ocio como en los negocios.
Los
cambios fundamentales son cuatro:
·
Como instrumento para informar e informarse
·
Como nuevo canal de comunicación
·
Como nuevo canal de formación y gestión del conocimiento
·
Como herramienta de transacción comercial
La
clave del éxito en Internet consiste en saber crear y mantener
comunidades virtuales constituidas por personas que acuden
a la comunidad para satisfacer sus expectativas o necesidades,
para aportar su colaboración y para sentirse parte de un colectivo
del que recibe y al que aporta. Es decir, los contenidos son
la razón que atrae a la gente, pero la sensación de comunidad
es la que la retiene.
II.
CONCEPTO Y ORIGEN DE LAS COMUNIDADES VIRTUALES
1.
CONCEPTO, TIPOLOGÍAS Y DINÁMICA
Creo
que es interesante, antes de entrar a conceptuar la comunidad
virtual, saber qué es una comunidad, en el sentido más estricto
de la palabra. Así, la tradición sociológica ha considerado
la comunidad como una agrupación de personas, que exhibe las
características de los grupos sociales, es decir, el conjunto
de personas que persiguen un fin común, para lo cual establecen
una red de relaciones producto de su interacción y comunicación,
cuya conducta se rige por un conjunto de normas culturales
y comparten intereses, creencias y valores comunes que establecen
los límites y la identidad del grupo y lo diferencian de su
entorno. Además, tienen una base territorial que le sirve
de asiento.
Toda
comunidad virtual descansa sobre tres pilares: los habitantes,
los lugares y las actividades. Una comunidad tiene todas las
probabilidades de formarse si un grupo de personas, encuentra
un lugar donde reunirse regularmente y una razón para interactuar
unas con otras. Hay otros dos componentes que no son necesarios
para la existencia de la comunidad virtual pero que surgen
cuando la comunidad comienza a funcionar: un gobierno y una
economía. El gobierno aparece al establecerse un conjunto
de normas que regulan las conductas de los miembros en la
comunidad y la economía cuando en la comunidad se administra
un bien escaso (material o inmaterial) y se efectúan transacciones
en las cuales se intercambia ese bien.
En
cuanto a los diversos tipos de comunidades virtuales, se puede
hacer una clasificación dependiendo del tipo de factor aglutinante
que se utilice:
1.
Comunidad centrada en las personas. La gente se reúne
fundamentalmente para disfrutar del placer de su mutua compañía.
A esta clase pertenecen los chats o cuartos de charla. Aquí
la gente intercambia sus comentarios en tiempo real. Por naturaleza
son bastantes efímero, por lo que no se suelen decir cosas
excesivamente transcendentes ya que los mensajes permanecen
en pantalla durante algunos segundos, nada más. Resultan ideales
para relajarse, hacer amigos y ligar, de hecho es la actividad
responsable del éxito de casi todos los chats.
2.
Comunidad centrada en un tema. Las personas que la componen
sienten un interés concreto hacia algo externo. Es decir,
se reúnen para charlar de algo en concreto o para contribuir
juntos a la creación de su contenido o de un proyecto. Por
ejemplo, un foro de discusión de política o una lista de correo
de colaboradores de una publicación. Al permanecer los mensajes
expuestos más tiempo, los participantes se encuentran motivados
para leer las contribuciones realizadas por participantes
anteriores y elaborar sobre ellas. Los mensajes son de mayor
longitud e incluyen argumentaciones, no simplemente opiniones.
3.
Comunidad centrada en un acontecimiento. Es una agrupación
de personas interesadas en un acontecimiento externo concreto,
como pueden ser los oyentes de un programa de radio o los
participantes en un chat con invitados. A diferencia de los
tipos anteriores, aquí los miembros de la misma coinciden
en una ocasión concreta (el acontecimiento) y pueden no volver
a verse más o no tener más contacto entre sí.
Otro
punto a tener en cuenta es cómo se produce la dinámica de
la comunidad virtual. Esta está orientada por el principio
de beneficio creciente, tanto para la organización que administra
la comunidad, como para sus miembros o usuarios y este se
produce en la forma de un espiral creciente:
1.
El primero de estos círculos está basado en el atractivo del
contenido del sitio, sobre todo, el contenido generado por
los miembros. Mientras más contenido tenga la comunidad más
personas estarán interesadas en entrar y generar a su vez
contenido.
2.
El segundo círculo está relacionado con la lealtad de sus
miembros hacia la comunidad. Si una comunidad virtual promueve
la interacción entre sus miembros, obtiene mayor lealtad de
los mismos y, a su vez, entre más lealtad tenga un miembro,
más interacción tendrá con los otros.
3.
El tercer círculo se refiere a la capacidad de la comunidad
virtual de identificar perfiles en el ámbito de cada miembro
como individuo. La participación creciente de los miembros
genera una información cada vez más completa sobre los miembros
de la comunidad y su perfil de preferencias, intereses y puntos
de vista. El valor percibido de la comunidad atrae a usuarios
externos y a administradores de otras comunidades, lo cual
estimula la realización de transacciones diversas entre los
miembros y entre los miembros de la comunidad de referencia
y otras del exterior. Este es el ciclo de transacciones. En
realidad, al describir esta dinámica, estamos describiendo
el crecimiento de una economía.
INMACULADA GARCÍA
Licenciada Derecho
Especialista Derecho Nuevas Tecnologías
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