La sentencia de 20 de noviembre de 2000 del Tribunal
de Gran instancia de París, en la que se sancionaba
a Yahoo por exponer y vender en su sitio web parafernalia
nazi ha sido histórica, no sólo por ser el primer
caso judicial que se lleva a cabo contra uno de los
grandes negocios de Internet, sino también por el
gran revuelo que ha provocado y las distintas opiniones
que han surgido al respecto.
Los
demandantes, UEFJ y LICRA, solicitaron al Tribunal
Francés que obligara a Yahoo a tomar las medidas necesarias
para impedir la exhibición y venta en su sitio de
objetos nazis en todo el territorio francés.
Yahoo
ya cumple con la Ley francesa que prohíbe la venta
y exposición de objetos nazis, pero esta sentencia
obliga al portal a impedir que los franceses accedan
a una página con sede en otro país.
El
tribunal pretende que utilice un mecanismo de bloqueo
de acceso para los ciudadanos franceses. Los demandados
argumentan la dificultad de llevar a cabo este control.
Pero ¿es técnicamente posible limitar el acceso en
virtud de la nacionalidad del visitante? Es posible
limitar el acceso identificando las variables que
recibe el servidor en el momento de una petición http
por parte del navegador.
De
las variables disponibles que puedan llegar a relacionarse
con la "nacionalidad del navegante" son:
Se
puede programar el servidor para que no responda a
peticiones realizadas por navegadores en idioma francés
y/o por IPs que han sido asignadas a ISPs y operadores
franceses. Por ejemplo, para bloquear toda España
se utiliza "*.es". Esto indica que todas
las direcciones que tengan como extensión final ".es"
no acceden al sistema. Pero ¿en qué grado será eficaz?.
La
eficacia sólo alcanza un 80% y además existen lagunas
en este control, ya que hay abonados a proveedores
internacionales ( tipo AOL ), los cuales se les asignan
un número IP Americano, sea cual sea el lugar desde
el que se conecten a la Red, lo que hace imposible
su identificación. Otro método para no ser detectado
el país de procedencia de la conexión es que ésta
se produzca a través de un servidor francés, con IP
francesa, enmascarándose a través de un servidor intermedio
situado fuera de las fronteras galas.
La
compañía también argumenta que para bloquear el acceso
a estos sitios tendrían que eliminar palabras en los
motores de búsqueda, tales como nazi, lo que supondría
obstaculizar el trabajo legítimo de historiadores
e investigadores, y prohibir indiscriminadamente a
los usuarios el ingreso a sitios que contengan este
tipo de palabras.
Los
demandados, Yahoo. fr y Yahoo INC. interpusieron la
declinatoria de jurisdicción para evitar que conocieran
los tribunales franceses, y considerar competentes
a los tribunales americanos, en base a que:
¿Por
qué se demanda en Francia?, ¿es competente el Juez
francés? Los demandantes se basan en el hecho de que
desde allí, desde Francia, se accedió a los contenidos,
y es allí donde estaba localizado el servidor. Demandan
a Yahoo.fr porque es una filial de Yahoo.INC. y demandar
a la matriz supondría topar con el derecho a la libertad
de expresión, recogido en la 1ª Enmienda.
En
EEUU prima la libertad de expresión, y es por ello
que Yahoo.INC. no advertía en sus páginas del contenido
de las mismas, a diferencia de Yahoo.fr que sí lo
hacía. La duda radica en saber si el hecho de que
los usuarios en Francia, franceses o no franceses,
accedan a sitios americanos hace competente a la jurisdicción
francesa.
Internet
constituye una tecnología de vocación mundial, universal,
sin fronteras físicas, entonces, ¿cómo aplicaremos
las fronteras legislativas a esta red de redes?. Si
esta jurisprudencia se generaliza, todos los propietarios
de páginas y sitios web tendrían que respetar, no
sólo la ley francesa, sino todas aquellas leyes de
cada uno de los estados en que operen.
Cada
portal va a tener que adaptarse a la legislación de
cada país si no quiere tener problemas, pero es una
labor muy compleja, dado el gran número de legislaciones
existentes y a la diversidad de las mismas.
Regular
de forma unitaria Internet es muy difícil, ya que
supondría unificar todos los criterios legales de
todos los países en una sola legislación o marco legal.
De esta forma, un país Islámico podría demandar a
todos los sitios que vendan productos derivados del
cerdo o a aquellos que defiendan los derechos de los
homosexuales. De esta forma se llegaría al desvanecimiento
del principio de territorialidad de la ley. Internet
no tendría una sola legislación, sino todas.
Los
principios que rigen la Ley Aplicable y la Competencia
Jurisdiccional cambiarían radicalmente. Sin embargo,
hay que admitir que no se puede tolerar cualquier
contenido en nombre de la libertad de expresión, no
es posible que Internet goce de un privilegio que
los otros medios externos a la Red no tienen. Es una
cuestión muy controvertida porque para cada estado
o gobierno los contenidos serán distintos por lo que
cada vez se irá estrechando más el campo de actuación
y expresión de Internet. Por otra parte, es probable
que las sanciones aplicadas a Yahoo nunca se concreten,
porque para que sean efectivas es necesario que sean
ratificadas y avaladas por un juez estadounidense,
lo cual es poco probable que se dé.
El
tema aún no está zanjado, ya que esta sentencia provocará
muchos dolores de cabeza a aquellos que pretendan
basarse en ella para fundamentar sus demandas y aquellos
que se vean en la necesidad de demostrar la incongruencia
y sin sentido de la misma.