Encriptar el correo electrónico, medida de seguridad para el robo de información

¿Sabes para qué sirve encriptar o cifrar el correo electrónico?

Esta es una medida que se está poniendo de moda, especialmente tras los casos de espionaje que han salido últimamente a la luz. Simplemente se trata de tomar una medida de seguridad adicional de tal modo que el correo electrónico se convierta en una forma de comunicación segura, sin temor a que personas ajenas se enteren de conversaciones que pueden revelar datos privados o que ocurran casos similares al del famoso Edward Snowden.

Al cifrar el correo electrónico lo que conseguimos es que sólo el emisor y el receptor pueden acceder al contenido de ese correo mediante la activación de una contraseña. Los expertos aseguran que este sistema tiene no obstante algún que otro inconveniente pues el hecho de usar una contraseña le hace también vulnerable, ya que al final esa clave podría ser interceptada igualmente por un cibercriminal.

 
Lo que parece ser más efectivo en este sentido es enviar los correos a través de un sistema de encriptación PGP. Este método se basa en una clave de encriptación única que se guarda de forma individual por cada usuario en sus distintos dispositivos: smartphone, tablet, ordenador, etc. De este modo, el propietario de las claves es el mismo usuario y no los proveedores de correo, lo que hace más seguro el sistema. Realmente el PGP consiste en generar dos claves, una pública y otra privada. La primera debe ser accesible a todo el mundo y se usará en toda comunicación que se quiera establecer por medio del correo electrónico, y después habrá una contraseña privada, de modo que el mensaje sólo pueda ser visto por el receptor, ya que sólo la tendrá éste.

 
Este sistema cifra el contenido de los mensajes, aunque la dirección del remitente y el receptor o el asunto del mismo siguen siendo visibles y, por tanto, la posibilidad de ser interceptados por los ciberdelincuentes sigue presente en estos aspectos.

 
Tanto Google como Yahoo, han asegurado que van a hacer posible esta medida, aunque actualmente existen programas que permiten instalar esta alternativa para los distintos proveedores de correo electrónico. La cuestión es conseguir la compatibilidad entre las distintas plataformas de emails y que no se produzcan problemas de interacción.

 
El principal inconveniente de este método es que resulta menos cómodo que el simple hecho de enviar emails sin más, porque implica usar contraseñas, algo que los usuarios en general rechazan a priori debido a la cantidad de claves que han de utilizarse para acceder a los servicios de Internet. Sin embargo, tiene a su favor que incrementa la seguridad y la posibilidad de que los grandes proveedores de correo puedan acceder a información de índole personal.