Detenidos por usurpar identidad, contratar servicios de telefonía y vender los terminales

La Policía Nacional de Elche ha desarticulado una banda que se dedicaba supuestamente a las falsificaciones de documentos, estafas y compra-venta de teléfonos móviles. Se han producido un total de 12 detenciones y se han intervenido artículos valorados en aproximadamente 27.000 euros.

fraude teléfonos móviles

Los arrestados han sido puestos en libertad después de prestar declaración y las diligencias han sido remitidas a la autoridad judicial. Los hechos se iniciaron el pasado día 4, cuando agentes de la Brigada Local de la Policía Judicial de Elche detuvieron a un hombre y una mujer por vender un teléfono móvil de procedencia ilícita en un local de compra-venta.

A raíz de la investigación se comprobó que los dos sospechosos actuaban usurpando la identidad de sus víctimas, recabando datos con los que abrían cuentas bancarias online y contrataban con ellas líneas telefónicas para la obtención de esos terminales telefónicos. Con esta actividad, la banda desarticulada lograba importantes cantidades económicas.

Los agentes registraron un total de dos viviendas e inspeccionaron cuatro establecimientos de compra-venta en Elche, en los que se encontraron 64 teléfonos móviles, seis tabletas, 3.230 euros en efectivo y documentación varia.

La banda utilizaba dos procedimientos: usurpaban datos de terceras personas para abrir una cuenta bancaria y solicitar una línea telefónica en su nombre, con la que obtenían un terminal gratuito que luego vendían, o bien solicitaban a personas con bajos ingresos económicos que solicitaran una línea en su nombre y derivasen la facturación a una cuenta bancaria a cero que nunca dispondría de dinero. El beneficio económico que obtenían de esta estafa se repartía en diferentes porcentajes entre los responsables del establecimiento de compra-venta, y el arrestado que llevaba los terminales a vender.

Los arrestados conseguían así importantes beneficios económicos comercializando un producto obtenido de forma ilícita, y que a veces incluso implicaba técnicas de suplantación de identidad. El problema puede incluso repercutir en el cliente que compra en esta clase de negocios de compra-venta un terminal que ha sido obtenido de forma ilegal.

La estafa estaba perpetrada por los arrestados en conocimiento de la propia empresa de compra-venta, por lo que el fraude era mucho más difícil de detectar.

Normalmente, estos negocios de compra-venta de productos poseen unas normas internas por las que garantizan que los objetos vendidos han sido obtenidos de forma lícita, y que el vendedor es el dueño legítimo de ese objeto. Aún así, existen estafas de este tipo que buscan saltarse esas normas para obtener un beneficio económico.

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