Una banda estafa a Spotify publicando un álbum en blanco

Una banda de música originaria de Los Ángeles, EEUU ha intentado cometer una estafa consistente en publicar un álbum en la conocida plataforma de música Spotify que no contenía ningún tipo de música grabada.

La banda, llamada Vulfpeck, subió a Spotify un álbum llamado “Sleepify”, destinado a financiar su gira de conciertos. Los fans que se descargaron el disco en realidad se encontraron con un montón de archivos de audio carentes de música.

La política de la plataforma de música establece que se les pagará a los creadores del álbum 0,007 dólares por cada reproducción, por lo que la deuda de Spotify con la banda estadounidense ascendía a 20 mil dólares.

La plataforma digital de música se percató de lo que ocurría y su portavoz, Graham James, hizo las siguientes declaraciones: «Es un truco ingenioso pero preferimos álbumes anteriores de Vulfpeck. ‘Sleepify’ parece haber sido creado por John Cage».

Después de estas declaraciones con las que vemos que Spotify se tomaba la estafa con humor, la compañía obligó a Vulfpeck a retirar el disco completo, argumentando que violaba sus términos y condiciones.

Lo que no está claro todavía es si Spotify pagará la cantidad debida a la banda de música o si iniciará acciones legales.

Las nuevas tecnologías abren una nueva forma de comercializar muchos productos y servicios, entre ellos los relacionados con las artes y la música, gracias al pago por descarga de un documento o a los múltiples anunciantes que están dispuestos a colocar publicidad en una obra concreta para llegar así a su público objetivo.

De esta forma, se abre un nuevo modelo de negocio que permite a profesionales que están empezando su andadura profesional publicar sus obras en plataformas como Spotify. Esta libertad, sin embargo, puede derivar en problemas como fraudes o estafas, que buscan obtener un beneficio económico engañando a estas plataformas.

La mejor solución es comprobar siempre la veracidad de lo publicado, y redactar unas normas de uso de la plataforma, que tengan como objetivo garantizar una calidad especial para el usuario final.

En este caso, la banda pretendía obtener un beneficio económico derivado de la descarga de un disco falso, que no contenía música alguna. La deuda contraída por Spotify asciende a 20.000 dólares, aunque puede ser que denuncie la estafa ante los tribunales.