Condenado por un delito de revelación de secretos al subir copia del sumario de un juicio

La Fiscalía del Principado de Asturias pide tres años de cárcel para un hombre acusado de subir a internet una copia completa de una causa que tenía en un juzgado de Gijón contra tres imputados por delitos continuados de daños informáticos.

La Fiscalía sostiene que el acusado actuó con intención de perjudicar la reputación de las tres personas imputadas por una causa abierta por presuntos delitos de daños informáticos continuados, que se sometieron ayer a una vista oral en el Juzgado de lo Penal número tres de Gijón.

Supuestamente, el acusado obtuvo de forma ilícita una copia completa del sumario y lo colgó en internet a través de una plataforma de blogging. Al hombre se le acusa de un delito contra la intimidad por revelación de secretos del artículo 197.3 y 4 del Código Penal y solicita tres años de prisión y el pago de una indemnización de 2.000 euros a cada uno de los perjudicados.

En este caso, el acusado se ve envuelto en la causa cuando él había sido víctima de otro delito. De todas formas, este hecho no resta importancia a la revelación de documentos secretos que constituye un delito contra la intimidad de los tres acusados.

Revelar documentos secretos que puedan perjudicar a terceras personas es un delito contemplado en el Código Penal español, y está castigado con penas de cárcel. En este caso, el acusado se enfrenta a tres años de prisión y deberá pagar indemnizaciones a cada afectado por valor de 2.000 euros.

Muchas personas piensan que el anonimato relativo de internet admite que se publique cualquier información, aunque cada vez salen a la luz más casos que nos hacen testigos de la importancia que las autoridades dan a la revelación de secretos y a los delitos contra la intimidad en la red. Hay que tener en cuenta que internet es un vehículo a través del cual una información se difunde masivamente y a gran velocidad, por lo que el hecho de subir documentos que comprometan a terceras personas puede provocar graves daños personales.

En este caso, una persona que había sido víctima de otro hecho no menos importante, un delito de daños informáticos, no tuvo en cuenta la repercusión que podía tener el hecho de subir documentos relacionados con el juicio a internet. La Fiscalía ha considerado que esto perjudica gravemente la imagen personal de los otros acusados, por lo que le ha castigado.