La mayoría de delitos en Internet se resuelven

Iniciar una investigación de un delito en la red puede ser complicado. Existen usuarios que son verdaderos expertos en ocultar su identidad y muchas redes sociales no colaboran en investigaciones internacionales o consultas que les llegan a sus sedes de Estados Unidos.

Según Enrique García, jefe del Grupo de Delincuencia Económica y Tecnológica de la Jefatura Superior de Policía de Extremadura, en muchas de las investigaciones se llega a detener al culpable, aunque suele ser por la existencia de varias líneas de investigación abiertas o por la reiteración en los actos por parte del culpable, que tarde o temprano acaba cometiendo algún fallo, momento en el que entran en escena las autoridades.

Las causas de los delitos en la red son muy diversas. En ocasiones, los delincuentes creen que están amparados por el anonimato de la red, y que pueden hacer todo aquello que quieran, incluso si constituye un delito en la vida real. Por otra parte, hay personas que actúan por mero desconocimiento, publicando y exhibiendo gran parte de su vida y la de quien les rodea en Internet.

Enrique García nos explica que “casi todos los delitos se pueden cometer por Internet, hasta matar. Se puede entrar en el ordenador de un hospital a través de la red y cambiar la medicación de un enfermo hospitalizado y llegar a causarle la muerte”. En la red se cometen hasta delitos que se consideran de violencia de género o ciberacoso a menores. Los más comunes son las estafas, y muchas veces se producen robos de tarjetas de crédito y la obtención de datos y claves personales para acceder a plataformas bancarias.

Si somos víctimas de calumnias, insultos, injurias, usurpación de identidad, amenazas, acoso u otros delitos que identifiquemos debemos denunciarlo cuanto antes ante la Policía. Debemos, para ello, presentar pruebas como capturas de pantalla para poder acreditar y constatar los hechos. A partir de esta denuncia, las autoridades iniciarán una investigación que llevará aparejada la búsqueda y determinación de la identidad del culpable por mandamiento judicial.

Hay casos en los que no existe una resolución ya que el delincuente ha dejado de cometer el delito, por lo que es complicado determinar su identidad. En otros casos, esto se debe a que el autor ha actuado específicamente para no dejar rastro en la red. De todas formas, Enrique García nos dice que la mayoría de casos se resuelven, lo demuestra que estos actos en la red no quedan impunes, al contrario de lo que mucha gente piensa. Es importante, por tanto, denunciar si somos víctimas de estos actos, ya que si todo va bien se podrá encontrar al culpable.