Estafa piramidal: “el gran truco”
La policía española investiga lo que se presume un nuevo caso de estafa piramidal. Al menos 70 mil inversores habrían sido engañados por una empresa que desapareció con un botín millonario.
Un presunto holding internacional llamado WishClub Lifestyle que operaba desde Madrid, está siendo investigado por la policía nacional tras varias denuncias por estafa recibidas por inversores.
Según información publicada en la prensa, al menos 70 mil personas de 52 países habrían sido engañadas por esta empresa que operaba desde Alcobendas a través de la red. La misma ha desmontado su sede sin previo aviso, desapareciendo junto a unos 7 millones de euros.
Nuevamente, internet ha sido el vehículo para captar a las víctimas. Básicamente, lo que WishClub ofrecía era rentabilizar el dinero de sus inversores invitándolos a promocionar la imagen de marca en las redes sociales. A mayor presencia en las redes, mejor posicionamiento en google, lo que acarrea la captación de nuevos inversores y mayores beneficios. Para convertirse en socio activo de la empresa, había que “invertir” entre 225 y 1.125 euros, aunque muchos han superado esta cifra.
En agosto del año pasado, la empresa alegó un “traslado a Dubai” con el objeto de “expandir el negocio”. Pero lo cierto es que ha dejado de pagar las comisiones de los inversores, quienes han comentado a la prensa que su dinero, al que no pueden acceder, “quedó flotando en el ciberespacio”. A ello se suma que han perdido todo contacto con la empresa, que despidió a todos sus trabajadores sin ningún reparo. La policía nacional está investigando los casos, ya que el 60% de los damnificados son españoles, pero desde ya se presume que se trata de un caso de estafa piramidal clásico, sobre todo teniendo en cuenta que el creador de esta red es un joven brasileño, denunciado en su país por el mismo hecho.
¿Qué es una estafa piramidal?
La estafa piramidal, que bien podríamos denominar “el gran truco”, se basa en una teoría simple, pero de sofisticada aplicación. En pocas palabras, las mismas se presentan como holdings que invierten el dinero de sus clientes en mercados seguros como por ejemplo, el del petróleo. Pero nada de esto es cierto, ya que no son agentes inversores con profundo conocimiento de cómo funciona la bolsa internacional, sino meros estafadores.
Las empresas se basan en un sistema estructurado, donde en realidad los nuevos inversores pagan las comisiones de los más antiguos. Es decir, la empresa en cuestión no realiza ningún tipo de inversión, sino que su fin es recaudar el máximo dinero posible antes de darse a la fuga.
Para ello utiliza, lo que en el ámbito de la comunicación, el marketing y la psicología se conoce como estrategias persuasivas.
El primer objetivo consiste en conseguir credibilidad: alquilar una sede real (espacio físico), contratar personal de forma legal y organizar charlas o encuentros presenciales, tal como lo hizo WishClub en Madrid (para motivar la presencia de personas ofrecen recompensas a los asistentes).
El objeto es entablar una relación directa, cara a cara, presumiendo que no tienen nada que esconder. Lo segundo es convencer, mostrando casos de éxito (se suelen exhibir vídeos promocionales realizados por profesionales que cuentan las historias más increíbles). También se dispone de una página web, una revista corporativa y se refuerza el argumento presumiendo legalidad.
Durante los primeros meses, la empresa cumplirá su palabra y dará las comisiones a unos cuantos inversores, reforzando así su fidelidad. Estos inversores, seducidos por el dinero fácil, son instados a invitar a sus familiares y amigos, siendo sus casos la prueba irreversible de que la empresa cumple, pero desconociendo de que están siendo usados. El captador recibe la promesa de un mayor ingreso con cada nuevo inversor que sume. Esto genera una cadena, donde los nuevos inversores, impulsados por el increíble relato de su familiar o amigo, se convence de que es seguro invertir allí sus ahorros (ha trascendido casos donde se ha llegado a depositar más de 20 mil euros).
Una vez que se ha consolidado el círculo de confianza, la empresa se dedica a gestionar el ahorro de miles de personas que han sido atraídas con imágenes de éxito, opulencia y el vínculo afectivo. Pasado unos meses, cuando la empresa empieza a decrecer en el número de inversores y se acerca el vencimiento de los plazos para el pago de comisiones, la misma levanta la oficina, comunica a los empleados su despido arbitrario y desaparece. Concretamente, lo que hace es montar un nuevo espectáculo en otro país, donde actuará de la misma forma.
Por otra parte y a modo de cierre, cabe señalar que lo curioso de este último caso registrado en Madrid es que su gestor es nada menos que un joven de 21 años procedente de Brasil, quien a pesar de tener una investigación judicial abierta en su contra, ha podido montar una empresa en España ante el desconocimiento de las autoridades.
Redaccción: Gabriel Adrián Romero.
Lo que hace caer en la trampa a los inversores es la atracción por el «dinero fácil». En Corrientes (Argentina) es muy conocida la Mega Estafa de la Financiera Boston Continental, creada en octubre de 2005 y cerro sus puertas en diciembre de 2007, acusada por estafa y asociación ilícita.
Así es Ana Lía. La causa Boston fue un caso de estafa muy candente en Corrientes, debido a que era la primera vez que se cometía un ilícito de tal magnitud en dicha ciudad. Este tipo de «financieras» circulan por muchos países bajo diferentes nombres, pero el modo de operar es casi siempre el mismo. La promesa del «dinero fácil» sigue dando sus réditos.
Casi como una broma del dia del inocente, todo comenzó cuando la financiera cerro sus puertas, luego de dos años de funcionamiento, por supuestos desperfectos informaticos el 28 de diciembre de 2007. En la puerta quedo un cartel que citaba a los clientes para el 7 de enero de 2008, cita que nunca se concreto. La Boston Continental jugaba al viejo juego del sistema piramidal en el que los ahorristas firmaban un contrato, depositaban su dinero y recibian a cambio un interés mucho mas alto del habitual. Con ese atractivo de los altos intereses, miles de correntinos depositaron sus horros en la entidad cuyos empleados, en un primer momento, adujeron problemas informaticos para eludir los pagos. Luego, cuando cientos de personas se instalaron en la galería, los propietarios de la financiera «desaparecieron». Se presume que la estafa alcanzo a unas 4300 personas por una suma de mas de 50 millones de pesos.
Es exactamente lo que ocurrió. Lo increíble de todo esto es que dichas empresas han funcionado a la vista de todo el mundo. Ninguna autoridad ha tomado cartas en el asunto hasta que ya ha sido demasiado tarde. Habría que investigar más a fondo las regulaciones de los Estados sobre la instalación de financieras en las ciudades (¿quién las controla?).
Buen día,
actualmente esta una empresa llamada XifraLifeStyle que trae tendencia de inversion con retornos de comisión increíble, sera que valla a presentar el mismo caso ?