Nuestros derechos como consumidores

El derecho de consumo protege al consumidor o usuario que adquiere un bien, un servicio o un arrendamiento. Se trata de un conjunto de normas que ayudan a proteger al usuario y a garantizar su correcta participación en la compra, evitando que sea víctima de actos que puedan perjudicarle.

Debido al aumento de usuarios que utilizan internet para realizar sus compras, el derecho de consumo en el comercio electrónico está a la orden del día, y todos los internautas deben saber que tienen la misma protección que si comprasen en una tienda física. Estos derechos nos ayudan a estar alerta sobre posibles fraudes o estafas y también a acudir a las autoridades cuando desconfiemos de una transacción o cuando creamos estar involucrados en un acto de estas características. Es cierto que muchos usuarios creen que las compras en internet son menos seguras que las que realizamos físicamente, aunque esto no tiene por qué ser así si utilizamos webs de confianzas y usamos plataformas seguras de pago.

El primer derecho clave en un consumidor es el derecho a estar informado. La empresa que suministra el producto o servicio debe ofrecer la suficiente información sobre la transacción, las modalidades de pago, los plazos y las formas de entrega, así como la política de devoluciones y todos los detalles de la transacción. El cliente debe conocer en todo momento todos los datos relativos a la compra.

Muchos usuarios no saben que pueden desistir de su compra en los siguientes siete días sin que se les penalice por ello. Se trata del derecho de desistimiento, que solo desaparece si el producto está deteriorado, caducado, si se trata de un producto duplicable (un disco, por ejemplo) o si tiene un precio oscilante. El precio del producto debe ser devuelto en un máximo de treinta día. Si no se produce esta devolución, el consumidor puede exigir el doble de la cantidad adeudada y posibles daños y perjuicios.

Los objetos deben ser entregados según lo contratado en el momento de la compra. Es el vendedor el que debe responder ante cualquier fallo en este sentido. Además, si el producto llega defectuoso, el arreglo no puede tener ningún coste para el comprador.

Es obligatorio que todos los productos tengan una garantía de dos años, que permite el arreglo gratuito o la devolución en caso de deterioro del mismo. Además, los usuarios tienen derecho al servicio técnico y a la asistencia de repuestos durante 5 años desde que el producto deje de fabricarse.

Estos derechos ayudan al consumidor a protegerse frente a malas compras o productos que no cumplen las expectativas que se generaban en su promoción. Gracias a los derechos del consumidor, éstos se sienten seguros, ya que protege su compra de forma diligente. Muchos usuarios todavía desconfían de las compras por internet, y muchos de ellos no conocen el grado de protección que se les ofrece con los derechos de consumo. Lo cierto es que Internet es el escenario donde más se quebrantan estos derechos, muchas veces por desconocimiento no solo por parte del comprador, sino también del vendedor. En caso de necesitar información legal sobre consumo en Legadoo.com, un servicio de consultas y directorio de abogados, puedes encontrar solución.

Si crees que tus derechos como consumidor han sido vulnerados, lo mejor es que pongas el caso en conocimiento de las autoridades competentes para que puedan darte la mejor solución.