¿Cómo conseguir el derecho al olvido?
El derecho al olvido en Internet es algo a lo que llevan tiempo dedicándose distintas empresas. De hecho, hay compañías cuya labor es eliminar de forma estratégica esos comentarios, enlaces o informaciones que desprestigian a una persona o marca.
Los políticos constituyen uno de los grupos que más demandan estos servicios, según cuentan algunos expertos. Lo que se pide eliminar es muy variado y no sólo se refiere a cuestiones relacionadas con comentarios despectivos. En algunos casos, se solicita por ejemplo eliminar vínculos con determinadas empresas que pertenecen a políticos y que estos no desean que se sean conocidos.
En general, se está observando una tendencia al alza de este tipo de servicios, no sólo a raíz de la sentencia de Google, si no desde hace ya un tiempo atrás. La eliminación de ese rastro que no queremos que quede en Internet reporta mayor o menor dificultad dependiendo de dónde provenga la información. De modo que si lo que se quiere hacer desaparecer es algo que está publicado en un medio de comunicación o en el BOE, como ya se sabe quién está detrás es más sencillo actuar, especialmente si hablamos de personas que carecen de relevancia. En estos casos, se puede conseguir retirar el enlace o incluso sustituir un nombre completo por las iniciales del mismo.
El problema surge cuando ese dato está en un blog, una web o un foro. En estas ocasiones, a veces no es posible localizar al artífice de estos sites y es entonces cuando hay que recurrir al buscador y el proceso se vuelve más complejo.
Internet es una red de datos y como tal es un arma poderosa y de doble filo. ¿Qué ocurre por ejemplo si alguien aparece involucrado en una acto delictivo del que realmente no ha sido partícipe y su nombre aparece vinculado en distintas informaciones subidas a la Red? Ya se han dado situaciones de este tipo, de personas acusadas de pedofilia o de otros delitos, y de los que posteriormente se ha demostrado su inocencia, pero lamentablemente luego esa información no se difunde y prevalece la primera, la que fue negativa.
Muchos ciudadanos se encuentran indefensos ante este rastro pero como se está comprobando este tipo de situaciones pueden solucionarse por la vía legal. No se trata de eliminar los enlaces de forma fraudulenta, la mejor manera es llegar a una solución amistosa, pero si no se consigue lo recomendable es denunciar y acudir a juicio.
Hay quien considera que el derecho al olvido es como una especie de censura. Sin embargo, probablemente personas que han visto cómo sus ex-parejas han aprovechado Internet para difundir fotos que han dañado su imagen, no lo vean así. En estos casos, se puede solicitar a los blogs y foros dónde aparezcan que se eliminen esas fotos, también de forma amistosa, al menos en un primer momento. Y si no se consigue nada siempre está la vía legal.
Por último, también se está debatiendo el derecho al olvido cuando una persona fallece. ¿Qué ocurre en estos casos? Pues según los entendidos hay una demanda cada vez mayor de estos servicios para eliminar el rastro de un familiar fallecido. Lo ideal, sería no tener que acudir a una empresa que se dedicara a esta tarea, pero actualmente es la única manera de actuar o bien recurrir a la vía judicial.
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