¿QUÉ ES BIOÉTICA?

“La adopción de un nuevo paradigma requiere a menudo una redefinición de la ciencia correspondiente. Algunos problemas antiguos pueden ser relegados a otra ciencia o declarados “no científicos” por completo. Otros que previamente eran inexistentes o triviales pueden, con un nuevo paradigma, convertirse en los arquetipos reales de significativos logros científicos”  Tomas S. Kuhn.

La Bioética constituye una disciplina que cuenta con la posibilidad de abarcar una mirada compleja frente al universo estudiado de forma multidisciplinar con el apoyo de la física, la biología, la sociológica, la Biomedicina, la antropología, la filosofía, etc., dado que su objeto de estudio es el hombre enfrentado a la ciencia y la tecnología, donde no solo tiene que superar la naturaleza utilizado nuevas técnicas y visiones, sino que también tiene que guiar la vida en todas sus manifestaciones, sean biológicas, sociales, psicológicas y antropológicas. Esta forma de religación a modo del pensamiento complejo planteado por Edgar Morin, significa una aproximación de las diferentes disciplinas o teorías del conocimiento en  sus diversos contextos.
Todas las disciplinas y formas de ver la vida – al hombre – y sus creaciones suponen un diálogo inter y transdisciplinar, una reconstrucción, mediante la expresión de los individuos, del lenguaje y la comunicación, un espacio de entendimiento y consenso, de aceptación y cooperación, como fundamento de un nuevo pacto social, tal como lo plantea Jürgen Habermas. Un Mundo de la vida, donde cultura, sociedad y personalidad, tienen como común denominador el sujeto, el ser humano complejo bipolarizado: Racional y delirante /sapiens y demens), trabajador y lúdico (faber y ludens), empírico e imaginario (empiricus e imaginarius), económico y dilapidador (economicus y consumans) y prosaico y poético (prosaicus y poeticus).
Estas interacciones son múltiples, se retroalimentan de forma diversa, y ofrecen a la Bioética todo el campo de acción sobre el cual debe visualizar, analizar y plantear sus lineamientos a modo de ofrecimientos paradigmáticos para  Construir universos humanos, sociales, científico-tecnológicos, etc.
La Bioética con una visión así planteada contribuye a reducir la disyunción y reduccionismo de las ciencias, fomentado una mirada abierta correspondiente a los tiempos de globalidad en que estamos inmersos.

La Bioética planteada de esta forma se puede proyectar en un futuro posible, conservando necesariamente la herencia cultural y biológica. Una realidad cambiante, que surge de forma imprevista a veces y otras de forma previsible, pero que de todas maneras surge y ha de ser objeto de estudio y análisis.
Así las cosas, la Bioética es polidimensional, flexible  que ha de atender no solo a lo que hubo y podría haber de forma histórica y lógica, sino adicionalmente a lo que debería haber o debería ser, entrando  en el terreno de la ética.
La Bioética se contextualiza de forma dinámica e incesante en todos los órdenes, lo cual le permite permanecer, no relegarse, no dejarse excluir. Incluso dentro de lo incierto y extremadamente insólito.
La mirada multidimensional excluye el totalitarismo, las lecturas unidimensionales y reduccioncitas. Acorde con la paradoja Hipocrática, donde vivir es morir y rejuvenecerse sin cesar.
La bioética es coadyuvante de creatividad, por su condición contextualizante  de procesos, entrópica, reconocedora de novedades de procesos inéditos. Su conocimiento no es de clasificación y archivo sino de diálogo, invención, desafió y discusión. Se plantea entonces, solución a nuevos problemas, produce nuevas preguntas, cada vez más reflexivas, con menos posibilidades de evasión.
Su temario es la indisociabilidad del problema antropo-bio-cosmológico, donde el ser humano como individuo, ser social y especie, convoca a una ética que conlleva esta triple realidad, que entiende y explica la autonomía individual, la participación comunitaria, democrática y la conciencia de pertenencia a la especie humana con los demás seres vivos.

NANCY VELASCO PARRADO
Abogada
Especialista y Master en Bioética
Universidad Ramón Llull – Instituto Borja de Bioética
Barcelona (España)